Sé que éste año no ha sido el mejor en cuanto al blog, ni en cuanto a la escritura. Aunque no estoy disconforme con todos los cuentos cortos que he escrito, pero me hubiese gustado escribir algo más de mis blognovelas. Por algún motivo siempre llego a un punto en el que no me gustan... e intento rehacer todo. Es extraño, es como si un día pensara que lo que estoy escribiendo es de lo mejor y al día siguiente le encontrase miles de errores y fallas.
Tampoco ha sido un año demasiado propicio para la lectura, he estado algo desorganizada en el tiempo y por eso no he podido cumplir con las entradas del blog ni con mis metas de lectura.

Ademas, mi vida personal no ha ido muy bien que digamos, me he dejado ajar un poco y me he descuidado en todos los aspectos.

Por eso, es momento de hacer las promesas para éste nuevo año que espero sea mejor que el 2013.


Para el 2014 me comprometo a:

• Escribir 5 entradas, de ley, a la semana.

• Dedicarle a la escritura 2 horas diarias (yo vs. el papel, ninguna distracción).

• Terminar de escribir, mi primera novela, antes de julio. (Si no me pongo un plazo jamás la voy a terminar).

• Leer por lo menos 30 libros y reseñarlos.

• Llegar a los 50 seguidores en el blog (para ésta sí necesitaré la ayuda de ustedes).

• Dar lo mejor de mí en el nuevo proyecto de revista literaria en el que estoy colaborando (ya se enterarán más adelante).

• Pasar todos los 11 cursos que lleve (¡Me quiero graduar de una bendita vez!)

• Idear, diseñar, desarrollar y poner en marcha una bonita idea empresarial que me guste.

• Empezar a practicar yoga (creo que es lo que necesito, paz interior).

• Lograr que mis padres estén orgullosos de mí (tal vez ésta sea la promesa más difícil de todas)